Siempre han sido las manos frìas.
La noche ya impuesta, dictadora habla de la muerte,
de los muertos,
de mis muertos,
muertos imaginarios,
los muertos imaginarios de la pseudomujer imaginaria.
The Velvet Underground imaplantaba frìo.
Ondas sonoras frìas,
ondas mecànicas,
al principio todo es mecànico.
El amor es mecànico
y la posterior muerte es mecànica.
Mecànica POP inconciente.
4:48 y el medicamento siempre pusilànime
vaga por el cuerpo de la soñante,
la soñante ve un pito de azufre,
ve un maremoto negro,
ve a su psicòloga, a la loca y al demonio excèntrico
corriendo por una Casa de la Cultura invadida de rubiecitos,
el demonio excèntrico se pone dos patas de palo y corre,
¿a dònde se fue esta mierda?
lo ùnico que rescata de Freud era su alucinogenaccesibilidad.
Al despertar el ùnico consuelo de no manipular el frìo
es una mano que imagina.
Lo ùnico que falta ahora es una buena Sertralina.
Insisto con lo de la congruencia...¿existe?
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